El coleccionismo de arte es un estimulante e inspirador pasatiempo que a pesar de la creencia popular, no está solo limitado a ricos y famosos.

La definición de arte puede variar mucho de una persona a otra, pero hay piezas que trascienden las opiniones y son capaces de crear interés en toda clase de personas.

Hay varias formas de arte que puede elegir, para todos los gustos y bolsillos. Por eso lo primero que tenemos que tener claro es que estancia vamos a decorar, que imagen queremos transmitir y de que presupuesto disponemos.

¿Originales o réplicas de cuadros famosos?

En el mundo de la pintura tenemos un abanico casi infinito a nuestra disposición. Si tenemos una cartera con buen fondo podemos buscar obras originales de artistas de renombre, pero esa opción está al alcance de muy poca gente y en este artículo queremos enfocarnos en las personas que están comenzando su colección y no tienen un presupuesto tan amplio.

Para comenzar nuestra galería tenemos la posibilidad de adquirir originales de artistas noveles que nos gusten o comprar réplicas de láminas muy conocidas por el gran público.

Si hacemos una combinación de ambas tendremos una elección ganadora ya que por un lado tendremos lienzos que todo el mundo conoce y disfruta, y por el otro tenemos la posibilidad de que el artista al que hemos comprado la obra triunfe en un futuro y con el tiempo nuestra pieza se revalorice.

Buscar un pelotazo con una pieza de arte no debería ser nuestra motivación para hacer una determinada adquisición. Es algo muy difícil de que suceda y si no lo conseguimos solo nos creará frustración. Por eso los cuadros que elijamos deberían ser en función de nuestros gustos y no por ganar dinero con ellos.

No hay nada de malo en comprar una réplica de una pintura famosa. De hecho es una forma muy atractiva de decorar una habitación o una oficina. Todos conocemos y disfrutamos las grandes obras de la humanidad: La Gioconda, La Última Cena o el Gernika, y con un buen marco tenemos una gran obra que nos permitirá llenar cualquier pared.

Todo enmarcado

Una vez que descubra un original o una impresión que le guste, debería llevarlo a un profesional para enmarcarlo. Generalmente puede encontrar marcos en un amplio rango de precios, desde molduras de metal o plástico hasta la exclusividad que dan piezas de madera personalizadas y talladas a mano.

No hay que apresurarse a la hora de elegir como vamos a enmarcar nuestro lienzo. De hecho, debería tomarse su tiempo y deliberar sobre ello cuidadosamente ya que pueden tener un gran efecto en lo bien o mal que se vería en la pared donde lo queremos colocar.

Si quiere un look limpio y contemporáneo, una elección acertada sería el metal cepillado, que no sólo es barato sino que también es elegante. Hay muchos colores para elegir en este tipo de marcos, sin embargo una opción segura es el negro aunque el bronce también es una buena alternativa.

La madera es un material por el que muchos amantes del arte tiene predilección. No solo permite crear acabados con toda clase de formas, sino que además acepta muy bien una amplia variedad de materiales y colores como cobertura.

Un marco en color oro es muy habitual, pero también cereza o caoba son elecciones frecuentes cuando se trata de a los marcos de madera, ya que su color profundo y rojizo aportan un aspecto elegante a cualquier obra de arte.

Mejorando tus habilidades de coleccionismo de arte

Ser un buen coleccionista de arte es una cualidad que requiere cierta dedicación para lograrlo. Aunque algunos puedan pensar que los buenos coleccionistas lo son por otros motivos, la realidad es que actualmente tenemos todo el conocimiento que necesitamos a nuestra disposición en Internet. Así que, si quiere mejorar aún más sus habilidades y conocimiento en la materia, aquí están algunas cosas que puede hacer para alcanzar esa meta.

Leer es imprescindible para mejorar sus conocimientos en cualquier tema. Así, por un lado la lectura de libros sobre coleccionismo e historia del arte son una parte fundamental de nuestro desarrollo como coleccionistas, pero no hay que olvidar la importancia de estar al día con las publicaciones especializadas que podamos encontrar regularmente en nuestro kiosko habitual. Además de por supuesto visitar webs como esta 

Las exposiciones de arte

Acercarse a alguna exposición sobre las diferentes disciplinas del arte es una forma de mejorar tus conocimiento sobre coleccionismo. En ciudades de todo el mundo se celebran ferias y exposiciones con artistas nacionales e internacionales. Asistiendo a este tipo de eventos podemos ampliar nuestros horizontes en materia de cultura del arte y conocer a otras personas con intereses similares a los nuestros.

Esta es también una manera de descubrir artistas o piezas que no son tan conocidos y que tienen potencial para conseguir un gran éxito en el futuro. Sin embargo, lo más importante es que es una forma de ver obras de arte que pueden conmoverte y puede que sea parte de su colección en un futuro cercano.

Aunque coleccionar arte puede ser un esfuerzo personal, no hay nada malo en hablar con otros coleccionistas y saber más sobre su experiencia iniciándose en este apasionante mundo.

De hecho, hacer esto puede ser beneficioso para todos ya que así se pueden recibir recomendaciones de galerías para visitar, eventos a los que ir, artistas interesantes, organizaciones a las que afiliarse y otras cosas relacionadas con el arte. Todos podemos aprender de los demás, especialmente cuando llevamos poco tiempo en ello.

Reseñas: Ver la perspectiva de otro

Ver el arte en la perspectiva de otra persona es muy interesante. Recuerde que el arte es relativo y por lo tanto algo puede ser hermoso a tus ojos pero feo para los de otros y viceversa. Es por eso que debe aprender a utilizar las reseñas realizadas por críticos y consultores nacionales e internacionales de forma que sirva para sus intereses.

En vez de estar demasiado influenciados por lo que dicen, intentar conocer su trabajo y trayectoria para ver si lo que dicen sobre una determinada obra de arte es cierto.

También debería aprender algunos puntos sobre cómo critican una pieza, ya que ser capaz de ver los valores, las fortalezas y las debilidades de algo es una habilidad importante para desarrollarnos como grandes coleccionistas de arte.

Un poco de orientación no le hará daño si usted está realmente interesado en aprender. Si realmente quiere tomarse esto en serio, puede recurrir a un consultor especializado en arte, ya que con seguridad saben lo que están haciendo. También pueden enseñarte sobre coleccionar e incluso guiarte a la totalidad del proceso de compra de arte.

Conceptos erróneos con el valor de su arte

Conocer el valor del arte puede requerir cierta habilidad y experiencia. Si usted está comenzando una colección es muy probable que no tenga conocimientos sobre como valorar una determinada obra de arte, por lo que la primera opción a tener en cuenta sería recurrir a un experto en la materia. Sin embargo, si decide proceder por su cuenta asegúrese de evitar hacer algunos de los errores más comunes.

La mayoría de las personas que buscan el valor de una pieza tienden simplemente a mira la lista de precios y a partir de ahí establecer el valor de la obra en cuestión.

Sin embargo, un verdadero experto valorará otros factores de la situación del propio artista, del mercado del arte y de la coyuntura económica y política mundial. Las listas de precios pueden ser muy engañosas, ya que los valores de las obras de arte no sólo están determinados por su precio.

¡Es una ganga!

Es fundamental señalar que la mejor política de actuación es ir con cautela. Es cierto que existen las gangas, pero también es cierto que hay muchos mas timos y fracasos que chollos increíbles. Es por ello que la principal recomendación es ir con los pies en el suelo y ser conscientes de que somos inexpertos y puede haber gente que quiera engañarnos.

A veces, si una subasta no se publicita bien puede ser que tenga pocas piezas para exhibir o que no haya mucho interés de que vaya un gran número de personas. Por lo tanto, puede ser que si busca bien, encuentre piezas con tasaciones bajas en este tipo de subastas.

También hay casos en los que un artista novel o incluso con algo de renombre tenga una o varias obras con cierto éxito pero la gran mayoría de ellas hayan sido expuestas o subastadas en varias ocasiones pero no hayan sido vendidas. Estas obras son una buena opción para completar nuestra galería.

También puede ser difícil valorar la pieza si el rango de precios del artista es demasiado grande. Por ejemplo, un artista puede tener cientos o incluso miles de registros de subastas, que oscilan, por ejemplo, entre 1.000€ y 200.000€. Si no tenemos grandes conocimientos sobre tasación de arte, probablemente tendemos poca o ninguna idea de dónde encajaría la pieza con un rango tan vasto como ese.

La historia importa

Una de las variables más importantes a la hora de valorar una obra de arte es la historia que hay detrás de esa pieza y del artista que la hizo.

Factores como el hecho de que la pieza sea capaz de trascender su artista por lo que representa, cuando fue creado, donde se hizo, y otras características propias de la obra, juegan un papel fundamental en su valoración final. Por lo tanto, si no ha descubierto el significado histórico de un lienzo, entonces probablemente tendrá un valor bajo.