Consejos básicos para coleccionistas


  • 27 Mayo 2021

La capacidad de comprar y coleccionar arte está al alcance de cualquier persona tanto si es un profesional de algún sector relacionado como si no. No es necesario tener experiencia ni conocimientos previos en este sector, ni mucho menos haber obtenido un título en estudios relacionados con la historia.

La verdad es que todo lo que necesitas es interés y aprecio por las bellas artes y un anhelo por coleccionar, además de voluntad de aprender algunas técnicas simples que te ayudaría a evaluar cualquier tipo de obra de arte de cualquier período de la historia que se presente, sin importar cuál sea el artista o su nacionalidad.

Todas las obras de arte

Aunque podemos leer algunas sugerencias y recomendaciones que describen obras de arte específicas, debemos tener en cuenta que no hay ninguna ley escrita sobre cómo se debe hacer una buena galería y que no hay buen o mal método para coleccionar o comprar arte.

Si somos una de esas personas que quiere adquirir unas cuantas piezas, aquí están algunos consejos sobre cómo puedes ser un mejor coleccionista de arte.

Tres preguntas sobre la compra de arte

Si llega el momento de ver unas piezas que queremos adquirir, debemos hacernos estas tres preguntas para tomar la decisión más acertada

¿Quién es el artista?

Para responder a esto tenemos 2 fuentes: Comentarios y opiniones que pueda escuchar a gente del sector o textos escritos en revistas especializadas, libros de arte y otros documentos. Valorar la fiabilidad de dichas informaciones es una de las principales tareas que tendrá que aprender a hacer como coleccionista de arte.

Debemos ser muy cautos para identificar las opiniones patrocinadas, ya que normalmente están muy relacionadas con el propio artista, la galería que exhibe la pieza o el comerciante que la mueve. También puede venir de otros coleccionistas, amigos, familiares u otras personas del entorno del propio artista que estamos considerando.

Por otro lado, la información escrita puede hacer referencia a la trayectoria profesional del autor, exposiciones o subastas donde han estado sus obras, el catálogo con las principales piezas que ha realizado, datos relevantes sobre su vida u otros momentos de interés.

Para responder esto hay que empezar por conocer todas las obras que ha hecho el artista. Familiarizarse con el porfolio de piezas que engloban todas las épocas de su arte y analizar los aspectos públicos de su vida y recorrido como creador.

Para ello podemos recurrir tanto a Internet como a los vendedores y marchantes que vayamos conociendo a medida que nos iniciemos en este mundo. Con ello no solo podremos valorar el trabajo de la persona que estamos analizando, sino que también nos servirá para aumentar nuestros conocimientos de arte y mejorar como expertos en la materia.

¿Dónde ha estado?

Es importante saber dónde ha estado una obra de arte en particular. Para ello tendremos que buscar toda la información que podamos sobre la pieza. Es similar a hacer una biografía desde su nacimiento.

Esto puede ser útil ya que una buena procedencia mejora la valoración tanto de mercado como de calidad de dicha obra por parte de expertos, aficionados y marchantes.

Tener una buena procedencia en el mundo del arte es análogo a tener buen pedigrí en el mundo de las mascotas. Por ejemplo, si una pintura se exhibió en un museo de arte de cierto renombre, entonces es más interesante para el coleccionista que otra pieza con un pasado no tan claro. Si el lienzo ha ganado algún premio la valoración aumentaría muchísimo más.

¿Es justo el precio?

Para esta pregunta valoraremos las circunstancias que rodean a la obra en el momento de comprarla. No tendremos en cuenta cual pueda ser el valor de la pieza en el futuro ya que realmente nadie puede responder a eso.

Lo que debemos valorar es si la pieza tiene un precio justo hoy a día de hoy o no, y valorar el futuro que pueda tener esa obra es lo mismo que jugar a la lotería.

Esta es una pregunta muy importante, porque al igual que otros servicios o bienes, el arte a veces puede tener un precio excesivo.

Consejos para coleccionar arte

La colección de arte puede ser una afición gratificante, un pasatiempo, o incluso inversión. Si somos nuevos en este tipo de actividad, es posible que quedemos abrumados con el gran número de conocimientos y detalles que componen este sector.

Así que, para hacer las cosas más fáciles, aquí tenemos algunos de los mejores consejos que se puede obtener con respecto al coleccionismo de arte.

¿Por qué comprar?

Antes de nada tenemos que tener claro que el principal motivo por el que debemos comprar una obra de arte, es porque nos guste. Sí, así de simple.

Aunque puede ser de sentido común, mucha gente sigue pasando por alto esta importante idea. Hay quien compra un lienzo por consejo de un tercero, o porque vieron a otros comprando algo similar, por intentar hacer una inversión de futuro…

Si encuentras una pieza que te conmueve y que crees que puede mejorar tu vida, cómprala. No tiene que esperar a obtener la aprobación de otros para hacerlo.

¿De qué sirve la belleza de una obra de arte que has comprado si uno no la aprecia?

Recuerde, en el coleccionismo de arte, no hay nada más gratificante que encontrar una pieza que alcanza tu alma, especialmente si conserva esa capacidad aunque la hayamos visto cientos de veces.

Buscar a nivel local

Si no hay grandes museos, casas de subastas o glamurosas galerías de arte cerca de donde vive, entonces es momento de iniciar la búsqueda de pequeñas exposiciones y museos locales.

En muchas ocasiones este tipo de lugares suelen buscar un público de nicho enfocando sus obras a una determinada época de la historia o a un tipo determinado de artistas.

Sin embargo al enfocarnos en la búsqueda y análisis de este tipo de lugares no solo podremos encontrar nuevas posibilidades para nuestra colección, sino que una vez mas creceremos como conocedores del mercado del arte.

Además, los gestores de estos lugares a veces organizan conferencias para aquellos que estén interesados en coleccionar arte, lo que los convierte en lugares perfectos para conocer nuevos talentos y localizar piezas con un gran potencial.

Consejos adicionales para vender su arte

Además de informar a los posibles compradores sobre los detalles básicos de nuestras obras de arte, cuántas hemos vendido y quienes (si esto es posible) nos han comprado previamente, todavía hay más cosas que puedes hacer para aumentar las probabilidades de cerrar una nueva venta. Aquí puedes ver algunas de ellas.

Mostrar un catálogo

Una forma de animar a los posibles compradores es mostrarles fotos de cómo nuestras piezas han formado parte de alguna exposición, han estado en alguna película de cine o serie de TV o cualquier otro evento reseñable.

También, si hemos dedicado recursos a crear una galería digna de verse, podemos mostrar imágenes de nuestras piezas en su lugar correspondiente.

Oriéntese al servicio

Si realmente queremos cerrar una venta, debemos comportarnos como profesionales del sector. Dedicar el tiempo necesario para concertar y llevar a cabo las reuniones con los posibles clientes.

Tratar de estar lo más disponible posible para entregar su pieza en la casa u oficina del coleccionista. Ayudar a mover y colocar la pieza, o incluso hacer sugerencias sobre dónde colocarla si se nos pregunta.

Si el comprador no ha hecho una selección específica de cual de nuestras obras quiere, podemos ofrecerle elegir varias piezas para llevarlas a su destino y que elija con ellas colocadas para ver cuál le satisface más.

Hablar con naturalidad

Uno de los errores más comunes de los artistas y coleccionistas noveles es que hablan con un tono y unas formas muy poco apropiadas para intentar impresionar.

Sí, es impresionante si conoces un montón de técnicas, componentes y factores relacionados con el arte. Sin embargo, no todas las personas que estarían interesadas en comprar su trabajo son también artistas por lo que la jerga técnica puede aburrir o espantar a posibles clientes.

Si este es el caso, trate de no ahondar en acaloradas discusiones de arte. Trate de hablar en su nivel, ya que intimidar a su posible comprador sería lo último que querrías hacer.